Santas, Reinas, Mártires y Cortesanas: El tratamiento de la Mujer en Diamantes

Capítulo I La mujer en el sistema dramático de Diamante. Datos generales (p. 1)

A lo largo de los treinta años que, más o menos, dura su carrera de escritor dramático, Diamante experimenta en los distintos tipos de comedia con el ideal heroico que le impulsó en la vida. El héroe que atraía a Diamante en su primer momento como dramaturgo, es el héroe masculino por excelencia en su forma más pura.

El hombre para quien de vivir heroicamente es un deber, el valiente guerrero que acomete ante la amenaza de la muerte admitiendo al mismo tiempo su terror hacia ella1 Hay un momento en que Diamante deja de presentar la figura monolítica del héroe tradicional y de cantar las glorias guerreras de los grandes soldados de la historia y trae a la escena varones de increíble fuerza bruta, soldados mercenarios y guapetones.

Cabe relacionar el heroísmo unidimensional del soldado valiente, la fuerza bruta del soldado guapo, o del mercenario fanfarrón con el ánimo valiente de las protagonistas que casi siempre prestan su nombre al título de la comedia. Así se verá que en la obra de Diamante lo heroico constituye una ley interna que sirve para estudiar los temas y las líneas ideológicas fundamentales que gobiernan y encuadran las comedias.

La importancia de esto surgirá al tratar las figuras femeninas en conjunto y dentro de la respectiva comedia, se puede mencionar aquí que el mérito de Diamante como dramaturgo y poeta heroico se evidencia de manera más clara y convincente, en las figuras femeninas porque en los diversos matices del espíritu de la mujer halla el heroísmo distintos modos de expresión.

Hay en Santa Teresa y en La Magdalena de Roma, por ejemplo, hay un enfoque continuo sobre el problema dramático en el cual se manifiesta el deseo de querer satisfacer el autor una necesidad interna de lo que convenía a su personalidad, a su sentido del héroe y del mundo dramático que creaba en cada obra.

En otras comedias Diamante funde la fuerza física y el ánimo atrevido del héroe masculino con la capacidad heroica de la mujer, vuelve a hacer de la valentía un elemento fundamental en la creación de sus personajes, algo que llega a convertirse en rasgo característico de sus comedias y que hace de su teatro una exaltación verdadera de las almas fuertes y valerosas.

En María Estuardo, Catalina la Bella, Santa Teresa, Santa Juliana, Porcia, Fénix y Raquel, mezcla el coraje, el valor y la actitud resuelta y decidida con distintos matices amorosos. Al tratarlas dentro del tipo y resaltar su ánimo valiente, presenta a la mujer heroico-religiosa, heroico-moral, heroico-intelectual y heroico-sentimental.

La unión del heroísmo con el sentimiento amoroso, constituye una de las claves de este teatro. Su función es estética y psicológica. A través de ella Diamante va a mostrar una visión moderna de la comedia, la mujer, la virtud y la moralidad. Por lo tanto, cualquier intento de investigación sobre el teatro de Diamante ya esté movido por un interés histórico, estético o o valorativo, hace necesarios el conocimiento y la apreciación de las figuras femeninas, las que ocupan el primer plano en la comedia por formar ellas una especie de constelación especial dentro de la modalidad heroica del autor.